miércoles, 30 de noviembre de 2011

querido papá noel:

Quisiera que esta navidad le regales al diario La Capital un corrector de estilo. Sé que el diario viene de mal en peor, por falta de presupuesto y por falta de credibilidad, porque como dicen tantas boludeces ya la gente no les cree ni los compra, pero yo fui una niña buena toda el año, y fui a la escuela e hice todas las tareas, así que merezco leer el diario y no encontrarme con estas cosas que la maestra de primer grado siempre corrigió en los chicos que se equivocaban (que no es mi caso, claro...)

Bueno, ponele querido papá noel que no te alcance para el sueldo de un corrector de estilo, porque se trata de gente profesional que cobra caríiiiisimo, pero por ahí podrías facilitarles un corrector de tipeo nomás, dicen que en el procesador de textos, por ejemplo, vienen correctores de ortografía que podrías enseñarles a usar...

bueno, eso... viste qué buena que soy, no pido nada para mí, pero dale a ellos un alegría, porfi...
besos, besos y más besos para tus cornamentados ayudantes también...



Mirá esta pobre chica, Leonela, encima que no tiene bien definido el número de documento ni su identidad, en la misma nota, le cambiaron el nombre dos veces... no es justo!
Por otro lado, entiendo que los rosarinos nos comemos las "eses" pero por escrito no son taaan ricas!! los perjuicio son feo
Los rosarinos usamos muy seguido la unidad de tiempo "años" así que supongo que esta chica hace muchos "años" que viene en Rosario, no muchos minutos, perros, ladrillos, etc. etc. etc.
Luego, fijate, no me queda claro cuántas veces ni cómo se enteró Leonela que su número de documento era el de otra persona, por ahí se enteró varias veces pero se fue olvidando, con las preocupaciones de hoy día, es lógico....
Además, el hecho de que no haya podido sacar la licencia de conductor, porque para ella debería ser de "conductora" no le ha permitido CONDUCIR un auto para viajar al Chaco y a otros numerosos lugares que podría enumerar.
Bueno, bueno, no sigo, ahí está bien clarito, si todo esto no se corrige ahora, andá a saber cuándo...

saludos, muchaco'

Sauria

pst pssst: acá la nota: http://www.lacapital.com.ar/la-ciudad/La-joven-a-la-que-le-asignaron-un-DNI-de-otra-persona-debe-corregir-toda-su-vida-20111130-0048.html

lunes, 1 de agosto de 2011

Vos, sos bienvenido?

GEN71 - Vandalismo Gráfico: Vos, sos bienvenido?: "Para que no vengan con que esta gestión es puro cotillón y obras sub-ejecutadas, aquí tenemos el anticipo de lo que se viene en cuanto a las PROpuestas Buenos Aires 2011..."

viernes, 29 de julio de 2011

sobre las debilidades



Se es lo que se es
lo que siempre se ha sido
Se siente lo que se siente
en el centro del centro silente
tenga o no tenga evidente sentido

Y rara vez se es tal y como se quiere
se llora lo que se llora
uno no elige de quien se enamora
ni elige qué cosas a uno lo hieren

Y en lo más sutil de los cuerpos sutiles
lejos de la noria de causas y efectos
se tiene el corazón que se trae por defecto
así como Aquiles, por su talón, es Aquiles

La sed, aquella sed
la que el agua no cura
La cruz de un presentimiento
que nos suelta hacia los cuatro vientos
con el mandamiento de buscar a oscuras

Y en lo más sutil de los cuerpos sutiles
lejos de la noria de causas y efectos
se tiene el corazón que se trae por defecto
así como Aquiles, por su talón, es Aquiles

Se es lo que se es

(Aquiles por su talón es Aquiles. Jorge Drexler)

martes, 15 de febrero de 2011

metrópolis

Te dije que no soy radical, gordo, pero me encanta cuando te ponés asi cachondote con lo del peronismo y esas cosas populares de los negros, la cumbia, la foto de evita, esas cosas, viste... le dice con una sonrisa socarrona, porque sabe que la gastada lo está haciendo calentar. El gordo se sienta al borde de la cama, sacude unas órdenes de trabajo y se levanta porque ya viene su parada, Alberdi y Rivera Indarte, República de Flores, como a mitad del recorrido. El bondi está lleno de chicas florecidas, de pelos, de arrugas, de mañas florecidas. Los pasamanos se abren en ramilletes de relojes y pulseras de todas calañas, metales y plásticos varios, el aire negro de los embragues sacude las blusas y levanta las polleras veraniegas, como en un insólito paisaje multicolor, pegajoso y sucio.

La chica de lentes a lo Marta Minujín enrolla una y otra vez el pase a planta, otrora tercerizada y cortando vías, y ahora juguetea con el papelito enroscado de fecha, hora y destino. Mira por la ventana y sueña con comprar el baby-call más caro del mercado, ese que también agarra la frecuencia de los patrulleros. Su departamento sobre Rivadavia es chiquito y los pulmones de su bebé están sanos (por ahora) pero el ruido se cuela por las ventanas en tumultuosos trenes, bocinazos, frenadas y golpes, y si el pibe berrinchea porque tiene hambre no hay cristo que lo oiga.

El escribano de la segunda fila termina su segunda jarra de café del día, mientras traga por su boca masajea con su mano abajo de las mustias tetillas, porque el fluído va cayendo y va calando, y va pintando sus dientes y la punta de sus bigotes, o acaso el cigarillo que se fuma en el balcón cada 17 minutos. Otra vez haciendo horas extras en la cola de movistar, con lo que odia las compañías telefónicas! Si tuviera auto no sabés como se recorrería Yerbal de cabo a rabo.

Sucundúm. Un bache sobre la cinta amarilla de seguridad industrial, a las calles de este barrio mucho no las arreglan, el clarck retrocede y hace ese piii-piii-piii para que la gente se avive y se corra. Señora, le traigo el pedido de Coto pero dele que dejé la camioneta en doble fila: 2 leches larga vida, arroz instantáneo, café instantáneo, fideos instantáneos, pochoclo para el microondas, dos libros de iva-compras, la impresora matriz de puntos con las últimas 10 facturaciones presentadas en la AFIP, el repuesto del torno ese que se rompió de la CNC, la orden autorizada del cardiólogo, el jabón en polvo, más que blanco, blanco ala.

Un andamio con obrebros paraguayos se cae y se estrella en la vereda, justo sobre el cartel de la novela reciclada que esperamos con tantas ansias. Del susto, el chofer detiene el engullimiento de la hamburguesa, habráse visto, pero el Javier, que salió empleado del mes con el uniforme rojo y los pins engrasados, se apresta, solícito, a componer el desastre. Pone la baliza amarilla de "Wet Floor" y la cinta demarcadora y aquí no ha pasado nada, que se vayan a reclamar a su país. Frenada y descenso de pasajeros en Plaza Flores, de ahí al tren o al subte (que viene con demoras por piquete de esos negros de mierda que piden planes, tal como anuncian por el altoparlante)

Así anda la vida, che, sweet home buenos aires donde el cielo es tan gris... No es que me queje. Tanto. Pero la verdad que no veo la hora de llegar a casa. O de que llegue el fin de semana, para gastar toda esa plata que tanto nos cuesta conseguir, y aunque en casa ya no cabe más nada capaz que podamos aprovechar la promo 2x1 de cilindros hidráulicos (qué lindos qué lindos lo que siempre deseé!) esa que anuncian en los carteles luminosos de la hora de la cena, entre los chirridos del compactador de basura y las sirenas de los bomberos que vuelven de apagar incendios.